
El reloj sigue corriendo y de nuevo Griezmann está ante una gran decisión. Una decisión sobre su futuro. Una decisión que puede volver a alejarse del Atlético, ahora de manera definitiva porque esta vez ya no habrá regreso una vez se vaya. Ese tic-tac que le envuelve se ha mezclado con el de su propio reloj interior: mañana viernes soplará 34 velas en su tarta de cumpleaños. Esa edad a la que estandartes en el equipo rojiblanco como Gabi y Fernando Torres se terminaron en el club.