Palmeiras se ha convertido en una máquina de ganar. Es el único equipo en esta fase de grupos de la Copa Libertadores que ha conseguido llevarse la victoria en todos sus encuentros. Con Abel Ferreira, un director técnico portugués que ha sabido imprimir su estilo en el fútbol brasileño, el equipo ha mostrado una visión clara y un ritmo implacable durante más de cuatro años.
Por su parte, Bolívar enfrenta una ardua batalla. Los celestes necesitan al menos un punto en Brasil para mantener viva su ilusión en la Libertadores. De no lograrlo, su mejor opción será aspirar a la Copa Sudamericana.
Actualmente, Bolívar acumula solo tres puntos en el grupo, obtenidos tras un contundente 3-0 en casa frente a Sporting Cristal. El equipo, bajo la dirección del argentino Flavio Robatto, ha perdido sus otros tres encuentros, y para colmo recibió el martes un golpe muy fuerte al enterarse que su mejor jugador Ramiro Vaca, está suspendido provisionalmente por doping positivo.
