
Al contrario que en el caso de Szczesny, a quien el director deportivo del Barcelona, Deco, ha ofrecido un contrato de dos años porque ha convencido su rendimiento y, sobre todo, su integración en el vestuario, con el alemán hay dudas. Tiene contrato hasta 2028, pero las tres operaciones en el tendón rotuliano de la rodilla derecha pesan mucho; y su rendimiento como número uno de la portería está en cuestión.