
Venezuela recibirá a Bolivia el viernes (18:00) por tres puntos claves en su sueño por llegar por primera vez a un Mundial, el de Norteamérica de 2026.
Es un partido crucial para la Vinotinto como para La Verde, los de Batista marchan con 15 puntos en el séptimo puesto que da paso a la repesca intercontinental, uno por delante de Bolivia, su rival directo, a falta de cuatro fechas para el final de las eliminatorias sudamericanas.
Venezuela parte con ventaja frente a Bolivia. Juega en el estadio Monumental de Maturín (este), donde se mantiene invicta en la eliminatoria, y el rival tiene un récord pobre como visitante.
Pero la presión es grande. Disputa quizás el partido más importante de la historia del fútbol de este país, el único de Sudamérica que jamás llegó a una Copa del Mundo.

